Sigo Huroneando
en Agosto.
+
Es tanta la basura que se olfatea en el ámbito religioso y en el político, que podría pensarse en contratar al Flautista de Hamelin para que se de una vueltita por Argentina y la desratice. Pero debería llegar bailando
al son de la cumbia, porque las ratas nacionales son impermeables a una música
más depurada; quizá por falta de sensibilidad artística ¡o moral! Las ratas están formando manadas cada vez más hambrientas. Y ciertos
políticos, a quienes también les gusta el queso, se les asemejan. ¡Qué me
vienen con los antiguos malones; estos se tragan hasta la basura!
+ Con
motivo de la quema de urnas en Tucumán, se informó que allí se presentaron unos
dos mil quinientos candidatos, ¡pertenecientes a 500 partidos políticos!; para ocupar algún carguito en el gobierno.
Sólo en Tucumán. Trate de agregar los del resto del país, si tiene algún tiempo
para entretenerse, y cuénteme a cuantos de ellos tendremos que mantener confortablemente
alimentados. Claro que el soberano -luego de meditar un juicioso y erudito
dictamen- no ‘consagrará’ a todos los aspirantes, pero igualmente serán muchísimos políticos democráticos
en ciernes, los que engordarán a costa
del dinero de los jubilados y los trabajadores; del pueblo
en general.. Esto respecto a los elegidos, pero hay otra interesante deducción.
+ Si
Ud. suma el total de los postulados
incluidos en las listas de los partidos, con intenciones de vivir a costa del Estado, que se presentan en
todo el país, serán seguramente cientos de miles. Y si a estos les agregamos
todos los hambrientos que esperan y
envidian acechando devorar alguna presa, sin presentarse por uno u otro motivo,
se obtiene una cantidad escandalosamente elevada de argentinos que anhelan
vivir de la política, sin trabajar,
dando razón a lo expresado por el padre Castellani: la escuela argentina es
vivero de burócratas… de vagos diríamos popularmente.
+
Ayer y anteayer el ‘soberano’ se congregó en la plaza Independencia de Tucumán
protestando por el fraude electoral. Encabezaban la demostración, como siempre,
las banderas rojas del resentimiento traidor. Estando estos presentes, es indicio que no se trataba de nada serio,
nada decisivo para la restauración
política nacional. El ‘soberano’ pretende lo imposible ¡elecciones
limpias, transparentes! ¡Vox populi, vox Dei! ¡Para que la voz de Dios se
manifieste a través de él, según se cree desde la época de Suárez! Pero actualmente los rojos y la burguesía liberal
en general, no creen en Dios, sino que ellos
mismo son dioses, falsos e impotentes dioses, pues determinarán los candidatos de acuerdo al
irresistible mandato de la propaganda. A más propaganda más votos; ley
eleccionaria; porque la propaganda compele. Y ante los hechos no valen los
argumentos. Ya no se escucha, entonces,
la voz de Dios, ni la del ‘soberano’, sino principalmente la de la propaganda; y como la propaganda depende del dinero, en
definitiva, las elecciones está determinadas
por el ‘oro’ internacional. Aunque los liberales no lo crean y se
escandalicen; como se escandalizó muy
democráticamente el abogado Gandur, actual presidente del Tribunal electoral
tucumano, cuando traté de explicárselo. La degradación era inevitable.
+
Estas manifestaciones multitudinarias me recuerdan a los estériles,
inofensivos y ridículos ‘cacerolasos’
famosos, que el gobierno dejaba hacer riendo tras los visillos de la Rosada. ¡El ‘soberano’ se creía
soberano! El liberalismo es muy afecto a permitir estos desbordes
que no alteran para nada el proceso de descomposición. Tal cual Juan
Pablo II con sus multitudinarias congregaciones que lo aclamaban, por
permitirles ser ´católicos´ durante ese instante.
+
¿Se animan los tucumanos a pedir
elecciones ‘limpias’? ¿Pero en qué mundo
viven los argentinos?¿Continuarán
alimentándose con ciencia ficción? Como nuestros conciudadanos sólo conocen la historia falsificada, desconocen los fraudes unitarios, tan comunes
en el siglo XIX, y que se repiten desde ese entonces, en elecciones que
terminaban generalmente a los tiros. Luego le llegó el turno a las empanadas y al
vino que se repartían profusamente en los comités. Recordar a Martín Fierro. Posteriormente, cada
vez menos ‘limpias’, ya sin escrúpulos, los KK comenzaron a repartir ‘bolsones’
y subsidios. En estas últimas elecciones, ese mismo día, me crucé con dos ciudadanos ‘soberanos’ que
venían de votar con sus respectivos bolsones de regalo.
+
Siguiendo con el escándalo tucumano, los políticos interesados en mantener el
‘mito’ de la soberanía dejan caer unas observaciones que son realmente
ridículas. Después de tantos años de democracia que venga a ocurrir esto ¡es
inexplicable!, -dicen- aunque más bien
es lógico que así suceda en un régimen electoral viciado esencialmente de
corrupción. Es fácilmente comprobable que la ‘democracia’ no moralizó a los
argentinos, más bien al contrario.
+ Otros
claman por elecciones limpias, bien, pero ¿existieron en alguna ocasión
histórica elecciones transparentes?; si
existieron testimonian que el sistema es falso, considerando que ninguna
levantó al país, que se hunde
irremisiblemente mientras la corrupción aumenta; pues el mismo sistema impide
que se elijan buenos gobernantes. Que me demuestren que las elecciones limpias
engrandecieron al país. Por otra parte, si
hubo anteriormente otras elecciones
fraudulentas, como realmente las hubo, ya deberían haber modificado el sistema, de elección de gobernantes. Y los
que ahora protestan contra el sistema electoral actual, sabiendo que es
irregular y propicio al fraude, no
deberían haber presentado sus candidaturas. Además, respecto a la entrada de
bolsones con votos, se aclaró que los fiscales culpables pertenecen a varios
partidos; lo que demuestra que la corrupción del sistema está generalizada
y es entrañable.