LOS SUBSIDIOS SON PARASITARIOS.
Hay que eliminarlos lentamente, a medida que se ofrezca a
todos los argentinos trabajo digno ¡en blanco! Pero lamentablemente bajo este
Régimen omnipotente social-demócrata (integrado por conservadores, liberales,
socialistas, ‘obreristas’ y marxistas) se fomenta la desocupación, como treta para
tener extorsionados y dominados a todos los beneficiados con los subsidios.
Cada desocupado es un voto para el gobierno. Matemática
elemental electoralista: tantos desocupados tantos votos. El gobierno liberal, entonces,
quiere la mayor cantidad de desocupados, de pobres que mendiguen unos mezquinos
pesos; los obligan a votar por el gobierno si quieren cobrar.
Este voto es FRAUDULENTO, por causa de los subsidios y de
la propaganda totalitaria de los mercaderes del periodismo comercial, al
servicio del imperialismo; donde la persona no se expresa libremente. El voto
fraudulento es la sangre de la corrupta democracia liberal.
El
gobierno está obligado, IMPERIOSAMENTE, a ofrecer trabajo que cubra todas las necesidades
de las familias argentinas; espirituales y materiales.
LOS
DESOCUPADOS NO SON VOTOS, ¡NO HAN PERDIDO SU DIGNIDAD DE PERSONAS, AUNQUE ESTÉN
EXPRESAMENTE EMPOBRECIDAS!
¡ESTÁN
DEJANDO EN LA MISERIA A MUCHOS COMPATRIOTAS! QUE QUIEREN TRABAJAR, NO MENDIGAR
AL GOBIERNO LADRÓN.
EL
GOBIERNO ESTÁ COMETIENDO UN PECADO QUE CLAMA AL CIELO.
SI
NO PUEDE O NO QUIERE ¡METERLO EN EL CALABOZO, SU FUTURO ALOJAMIENTO! ¡ANTES DE
SER ARROJADO A LA MANSIÓN ÍGNEA!
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