Huroneando
en febrero/marzo 2017.
Son
tantas las raterías que están ocurriendo
en este democrático país, que el hurón, desorientado, no sabe a quien morder
primero, eligiendo sus víctimas casi al
azar; aunque así se le escapen algunas
bien gordas.
+- Debo decir unas palabras del
manoseado asunto de los reclamos docentes, tratado intencionalmente por el
periodismo, según es costumbre, evitando destacar lo principal de la protesta:
su meollo politico, el resentimiento
clasista, promovido por los sindicalistas. El Padre Castellani agotó el tema
docente hace unos 80 años atrás, pero la
situación hoy día es intolerable. Como he dicho en otra ocasión, las maestras
años atrás eran moralmente verdaderas
señoras que fueron ”amigas”, en las que una familia bien podía confiar sus
hijos. Aunque se les debe reprochar que, salvo distinguidas excepciones, la
enseñanza cultural que impartían fue deficiente, principalmente inflando el
mito del renegado Sarmiento, y divulgando el liberalismo. Pero la decadencia
moral y personal de las nuevas generaciones de maestros, generalmente sin vocación, su nula preocupación y
dedicación por la moral y la cultura, el patriotismo y la espiritualidad de los
niños es evidente; nadie puede dar lo que no tiene. Peor aún, por carecer de esos valores, los reclamos docentes son bocado
fácil para los agitadores marxistas, que los están arrastrando a promover
desórdenes políticos, y como ellos mismos aclaran cínicamente, enseñan luchando y luchan enseñando, ejerciendo en las calles, ya sin preocupación alguna por
los niños, liberalismo extremo, o sea comunismo; enseñan odio, destrucción de lo poco que resta de un casi
inexistente orden social. Desde Sarmiento, que cobraba cinco sueldos
simultáneos, hasta los acontecimientos
de hoy hay una continuidad vergonzosa de degradación docente.
+- A punto de publicar esta
huronada, escuché la noticia del escandaloso curriculum del dirigente Baradel,
que quizá por eso mismo está escalando rápidamente posiciones en la política del Régimen democrático,
porque cumple la condición de que para subir hay que ser algo o muy corrupto;
según la altura a la que se aspire. Esto
confirma ampliamente lo que escribí en el párrafo anterior. Recuerdo lo que
alguien dijo en la TV :
no hay un solo dirigente KK que no haya robado. El método que utilizan los
sindicalistas es sencillo, exigen beneficios
aunque sepan que no es justo pedirlos, o que no se les pueda otorgar, porque
las circunstancias económicas lo impiden. Desinteresándose de la situación
política nacional y del resto de la sociedad; sólo piensan en encandilar con una imagen de luchadores
insobornables a favor de sus afiliados. Falso, todo falso. Desarrollan una política
basada en el egoísmo de clase, opuesta
al Corporativismo, y por ende a la
Doctrina de la
Iglesia ; convirtiendo a los maestros en una masa manejable de
ignorantes que no saben el verdadero
papel que desempeñan en esta farsa, transformados en activistas sociales
marxistas, alucinados con resentimiento y ambición; en una masa que es la mejor
pantalla para ocultar las tropelías personales de los dirigentes.
+- Estoy asistiendo en estos días
a una nueva versión del “Éxodo Jujeño”, la extraordinaria decisión del inolvidable General Belgrano,
para salvar a la Patria ,
asumida patrióticamente en ese entonces por todo el pueblo jujeño, en una
manifestación de amor patrio. Pero, como
era previsible, este nuevo Éxodo nada
bueno tiene que ver con la
Patria , sino más bien contra ella. Vivimos un perverso
liberalismo donde cada cual busca su provecho, desentendiéndose del común y del
nacional. Actualmente, este nuevo Éxodo rumbea a través de la Cordillera , para visitar a nuestros “hermanos”, aquellos
que ejercían espionaje a favor de Inglaterra durante la guerra de las
Malvinas, y de paso cañazo comprar
artículos electrónicos baratos; elementos escolares y otras baratijas. ¿Quién
se acuerda de la traición durante las
Malvinas? ¡Ningún liberal deja de comprar barato aplicando una sanción
patriótica personal, al menos al estilo Ghandi, según haría todo bien nacido,
contra esos vecinos que históricamente nos perjudicaron; con quienes solo tenemos una indiferente proximidad geográfica
y una altísima separación política..
+- Todo sea por ganarse unos
mangos; y allí fueron abogados, ingenieros, jueces, médicos, políticos, la flor y nata del
Régimen, todos con espíritu pichulero. Escuché a uno de esos personajes: -si, -
decía- la Coca
estaba 10 pesos más barata, y los panchitos también, y los calzones, y la tableta y el alojamiento. Cotejaron rigurosamente los precios para
ahorrase unos pesitos. ¡Fantásticas vacaciones! ¡Vacaciones globalizadas! Aunque
para ahorrarse esos pesitos debieron
hacer una cola kilométrica, durante más de ocho horas en plena cordillera en
Mendoza, bajo un sol ardiente y barridos por el frío helado, y otro tanto en
otros pasos, frente a la Aduana
chilena, y otro tanto a la vuelta, y por si fuera poco, soportar la tradicional trompa chilena cuando
olfatean un argentino.
+- Una diputada, llamada Conti,
expresó por la TV
que si hubo corruptos entre los miembros KK fueron una excepción. Quizá no haya
advertido que ella, como la mayoría de los Honorables KK
están incluidos en esa supuesta excepción, pues son cómplices de los delitos, por
hacer la vista gorda y no denunciar esos escandalosos negociados de los líderes
KK pata abajo. Y así la excepción se torna multitudinaria. No se si Grosso, el
eximio historiador de las mentiras históricas seguirá vivo, pues en ese lamentable caso debería contratar a la tal
Conti para que escriba la historia del gobierno KK en consonancia con los propios fraudes de
Gtosso, incluyéndola en los libros de texto escolares,
para mejor ilustrar a la juventud
argentina y terminar de idiotizarla
+- La simpática señorita Anabella
Azcar, que parece profesar el budismo y la reencarnación, dirige un algo insólito
programa de televisión, donde presenta a personajes extravagantes, que dan fama
a su programa; en uno de los cuales, dominada por un arrebato humanitario dio cátedra filosófica protestando
filantrópicamente para salvar a las mascotitas, y otros animales que no lo
son tanto, del maltrato de los perversos
humanos; porque luego de unos añitos girando en la estratósfera se convertirán
en seres humanos como nosotros. Así que debe tratárselas desde ya como a humanos. El cariño a una mascota es natural y
agradable, pero manteníéndolos en su lugar,
en su habitat natural, sin vestirlos de niños ni sentarlos a la mesa y menos recibir
lenguetazos en la boca. A las mascotitas, contrariando su naturaleza, las
tratan como a lesbianas y putos, pues
esa es la función en el mundo que le asignaron sus patrones pervertidos. Algo
así como convertirlas en ‘taxi-girl’ pero más económicas, para acompañar su
angustiosa soledad, y de paso satisfacer su lujuria. Porque de esta perversión
se trata, en muchos casos, la moda del
mascotismo. Estas actitudes no surgen del amor verdadero a los animales.
+- Como en algunas audiciones sus
invitados exigieron que los caballos no tiren más de los carros, acabando con
esos pintorescos carritos que circulan en Tucumán y Córdoba comprando y
vendiendo, o de los arados, ni que se
los dome, o impedir que los caballos
y los perros a hacer carreras, y muchas exigencias más…; debemos entonces
considerar a los animalitos como invitados de honor en este mundo cruel,
dejándolos vivir su vida ajena a la humana; colmándolos de atenciones para que no sufran ningún
esfuerzo inhumano. ¿Pero entonces, porqué obligan las señoronas gordas y los
señorones gordos a las mascotitas a llevar, entre mimos y zalamerias, y otras
muestras de cariño impúdico, una vida
irreal, que no condice con su verdadera naturaleza?
+- Ahora bien, me debería
sorprender, aunque no me sorprende sabiendo con que bueyes aro, que esta efusiva muestra de cariño no se manifieste en todos los ámbitos de la vida
animal, seguramente porque a las señoras gordas les sería temerario enfrentar los
enormes poderes que seguramente son los que promueven esta aberración del mascotismo, y si así fuera, existe en el fondo de este
lagrimeo una intención política, fomentada desde el primer mundo capitalista, de
desordenar y subvertir, de contradecir el sentido común, la ley natural y la Biblia ; además
la exposición de esas extravagancias que se exponen en todos los
programas de la Azcar ,
sirven a los invitados para hacerse notar
y aparecer en la TV. Cuanto
más delirante su opinión mayor popularidad; es el mejor alimento para los
televidentes.
+- Pero hay una situación
enormemente más grave y dolorosa, por la que somos todos los argentinos
responsables de inhumanidad. ¡principalmente las filántropas, tan celosas del
confort de los animalitos!, Porque además, si
existe algún trato salvaje y esclavizante es contra las gallinas ponedoras, enjauladas, casi
inmovilizadas de por vida. Por supuesto
qué gracias a este abuso comemos huevos más baratos. Pero ellas también son
animalitos, casi mascotitas, y nadie se preocupa de su dignidad y derechos
animales. Porque está bien la filantropía con nuestros animalitos, -futuros
humanoides que convergen todos juntos en el punto Omega, diría el loco
Tehilard- pero ¡es inadmisible que el precio de
los huevos se vaya a las nubes!- dicen ellas.
+- Cuando
tocan el Himno nacional, antes de cada partido de rugby, los Pumas seleccionan
cantar sólo las estrofas más vibrantes, porque el resto es un minué de una
chatura aplastante, propicia para bailar en los Salones literarios del
romanticismo, cuando algunos imitaban
las teorías criminales de la
Revolución francesa, pero no el ímpetu de la Marsellesa. Música
y letra de un Himno de ninguna manera inspirado en el espíritu nacional de la época. Para que el
Himno adquiera todo su significado, sin troncharlo, y manteniendo la
inspiración que correspondía, imaginé a los Pumas bailando el minué dentro de
la cancha, antes de cada partido, imitando la acostumbrada feroz danza
guerrera de los neozelandeses. Y esta escena que me presentó mi traviesa
imaginación tiene, pese a su ridiculez, algo de verdad, pues creo que,
exceptuando la época de Rosas, la política nacional se baila al compás de un
medroso, sentimental e irreal minué. Además de mortificarme también la vetusta y falsa letra del Himno, cantando la
rotura de unas cadenas para encadenarnos con las del imperialismo inglés al acecho, impidiendo
la expansión de la naciente Argentina en
búsqueda de su grandeza. En fin, considerando que todo cambia y se
modifica, eliminaría la letra que estorba y comenzaría el Himno gritando, como
en una antigua pulpería federal: ¡Viva la Patria , carajo!
+- Otra observación sobre las
nuevas modas sociales. Meses atrás en ‘Huroneando’ escribí una lista de los
nuevos, ridículos y estrafalarios
nombres que se le adjudican a los recién nacidos, copiados de la TVBasura. Años atrás, elegían
preferentemente el nombre sagrado de la Santísima Virgen ,
porque esas mamás sabían que el santo elegido acompañaría la vida de la
criatura. Hoy día, ya paganizadas, las modernas mamitas buscan los nombres más extravagantes, como para hacer notar que
están liberalizadas viviendo la moda. Pero esta tendencia a ponerse nombres,
que ni siquiera son sobrenombres, llegó a su apogeo con una nueva costumbre
impuesta con desparpajo y mala educación.
Gracias a la sutil imaginación de las niñas adolescentes, si Ud se
enfrenta con un grupito de ellas paveando por las calles, se llaman entre ellas
con el ya acostumbrado: ¡che, boluda!, y al instante casi todas ellas se sentirán
llamadas por el que debería ser su verdadero nombre.
+- Dicen sus secuaces que la
democracia se alimenta de las diversas opiniones que emiten los variados partidos
políticos que la integran; y que esta es su grandeza, lograda tras siglos de
obscurantismo y autocracia. Es esencial que en democracia reine su Majestad la Opinión ; donde cada uno,
desde el presidente hasta el último de sus diputados, dice lo que le viene en
gana, sobre todos los temas habidos y por haber, sin tener estudios serios
sobre ninguno, mientras favorezca, eso sí,
la posición política de él y de su partido. Ahora bien, si en esta época de las ’luces’ somos todos
sacerdotes, todos filósofos, si todos podemos opinar a gusto y piacere, todos
podemos ser parlamentarios. Sólo es necesaria una amplia campaña publicitaria,
y ¡a cobrar los módicos suelditos que se
autoasignan!, más ciertas gangas. Opiniones que reflejan, dicen mintiendo, la voluntad
popular. Opiniones que, en realidad, difieren entre ellas sólo en aspectos
superficiales, intrascendentes, sin la
menor intención de lograr el Bien Común
ni la grandeza nacional; que de ninguna manera está en los planes de los
liberales lograr. Son opiniones que no escapan fuera del Régimen liberal, que las abarca a todas. Porque el liberalismo
constituye un solo partido; la diversidad entre ellos es aparente. El libre
juego de las instituciones democráticas es un fraude. El Liberal es un Régimen despótico,
pues su libertad la disfrutan sólo los liberales; su historia expone regueros
de sangre argentina.
+- Un judío verdulero me dio una
clase práctica de economía; pues los judíos desde que maman las ubres maternas van
adquiriendo sabiduría financiera para la
intermediación y la usura. En Mar del Plata, donde pasé unos días vacacionando,
en el barrio Guemes, entré en la verdulería de ese hebreo, le pedí unas
ciruelas y cuando me dijo el precio casi lo mando a…; pero el judío
respetuosamente, como hablando con un troglodita, me explicó que esas ciruelas
eran chilenas y bien valía los $120 el kilo, que me pidió. Le repliqué,
ignorante de mí, que en mi pago comprábamos el kilo de ciruelas a $30.- y
entonces se despachó con su innato cursillo diciendo: los chilenos nos venden a $120 las que nosotros le vendemos a $30; es
imprescindible que así funcione la economía pues ”hay que mover la plata del mundo”,
sentenció textualmente. Dicho más claramente, es imprescindible que los
intermediarios se enriquezcan hambreando al pueblo. Quizá Macri fue despachante
en esa verdulería, aprobando el cursillo del hebreo.
+- Días después, en San Bernardo,
se me antojó comer bananas, quizá apremiado por mis ancestros simiescos; le
pedí al frutero 3 bananas, y al querer pagarle me sobresalté y le dije: -me está cobrando
$21, ¡a razón de $7 cada una, y $ 84 la docena! Yo quiero las dulces bananas
pecosas de Yuto –le dije- que las pago a $24.- la docena. Cuando esperaba un
sermón, como el del hebreo, diciéndome que la Argentina debe comprar
caro y vender barato, para que los hebreos muevan la plata del mundo, me contestó
tranquilamente, como la cosa más sabida, que eran bananas ecuatorianas. Terminó
así el diálogo y me fui sin las bananas, y sin comprender una jota de economía
internacional. Mi sentido común asombrado.